A través de los siglos: símbolos que nos conectan con la naturaleza y la cultura

Imaginá que en nuestra vida hay un montón de símbolos que, en realidad, vienen de lo profundo de los siglos, de la antigua cultura eslava, y constantemente nos encontramos con ellos. Por ejemplo, muchos de nosotros usamos joyas con el símbolo del kolovrat, que es un antiguo símbolo del sol que nuestros antepasados usaban como protección y fuente de fuerza vital. Ahora puede ser solo un accesorio de moda, pero si lo pensás bien, no es solo una decoración, sino un símbolo que nos recuerda nuestra conexión con la naturaleza y las creencias antiguas.

Cuando entrás a la casa de alguien, a veces podés ver en la pared, por ejemplo, un cuadro bordado con la imagen del árbol de la vida o muebles de madera tallada con patrones. No es solo decoración. El árbol de la vida, por ejemplo, simboliza la conexión entre generaciones y las raíces familiares. Es como si dijera: “Todo esto trata sobre la armonía y las tradiciones”. Estos símbolos no solo decoran el espacio, sino que le dan un significado especial, como si nos devolvieran a nuestras raíces, a lo que realmente importa.
Incluso en las cosas más simples, como en los textiles —toallas, manteles con patrones folclóricos— hay símbolos que para nuestros antepasados tenían un profundo significado. Por ejemplo, la flor de helecho es un símbolo de felicidad y búsqueda de la verdad. Ahora puede ser solo un ornamento en la tela, pero para algunos es un amuleto que trae suerte y bienestar al hogar.

Entonces, resulta que todos vivimos entre estos símbolos, incluso sin entender siempre su verdadero significado. Pero nos ayudan a sentir la conexión con el pasado, con nuestros antepasados, como si nos recordaran quiénes somos y de dónde venimos. A través de estas señales, tal vez sin darnos cuenta, seguimos viviendo en un mundo con lo que era importante para nuestros antepasados: la naturaleza, la familia y los valores espirituales.